El Fuerte(Frigiliana)
Según la descripción que se hace en "Rebelión y castigo de los morisco" de Luis de Mármol y Carvajal, se encuentra entre el lugar de Cómpeta y el mar. Este peñón tiene a levante el río Chíllar, que corre por asperísimas quebradas; a poniente el de Lautín que con igual aspereza se va a meter en el mar; a tramontana, hace la sierra de Bentomiz una quebrada muy honda, de donde comienza a subir el Peñón a mucha altura y al mediodía vuelve a bajar con otra descendida muy áspera que se parte en dos lomas: la una va a dar al lugar de Frigiliana. Tiene las entradas tan fragosas de riscos y de peñas tajadas, que poca gente, puesta arriba, lo puede defender de cualquier numeroso ejército. Por la parte del río Chíllar hay una acequia de agua, con que se regaban las tierras de Frigiliana y pasa la acequia al pie del Peñón ( "que era la ocasión principal que los movió a meterse allí porque no se les podía quitar el agua sin grandísima dificultad"). En lo alto del Peñón se hace un espacioso ámbito, no muy llano ni muy áspero, donde pudieran caber todos los moradores de la sierra de Bentomiz. El Fuerte tiene importancia histórica porque fue el último reducto que ofreció muchas dificultades a los cristianos en el desmantelamiento y dispersión de los moros. Martín Alguacil aún habiendo jurado lealtad a los cristianos y viendo que éstos no cumplían su palabra y que incluso querían prenderlo, cuando lo llamó el Corregidor de Vélez Arévalo de Zuazo para animarle a perseverar en su lealtad a su majestad y procurar lo mismo de sus vecinos, no se presentó sino que reunió a los suyos de Cómpeta y tras un largo y emotivo discurso los instó a defenderse y decidieron que el mejor lugar para ello era el Peñón de Frigiliana. Nombraron capitán general a Hernando el Darra, sus antepasados habían sido alcaides y alguaciles de Frigiliana,también nombraron consejeros para las cosas temporales y de religión y sin hacer daño a sus vecinos cristianos,se dirigieron al Fuerte; enterado Arévalo de Zuazo, fueron tras ellos pero los moros los repelieron enérgicamente y después de recoger a los heridos y muertos, se retiraron a Vélez para pedir refuerzos. Don Luis de Requesens,Comendador mayor de Castilla, lugarteniente y asesor de D. Juan de Austria, llegó por esos días a Vélez y enterado de los hechos quiso ayudarlos; después de obtener el permiso de D.Juan de Austria, que estaba en Granada, reunió un gran ejército y se dirigieron al Fuerte; acamparon en la fuente del Álamo y en la fuente del Acebuchal. La víspera de San Bernabé ( 1569), el Comendador dió orden de lo que se había de hacer el día siguiente, atacarían ,desde puntos diferentes y al mismo tiempo: por la loma de los Pinillos D.Pedro Padilla con sus huestes, por la loma de Frigiliana D. Juan de Cárdenas, con las suyas, por la otra loma que hay entre éstas dos D.Martín de Padilla y por el Conca las compañías de Málaga y Vélez; esta parte estaba menos protegida, porque el acceso es tan difícil que los moros no creyeron que ningún ser humano pudiera escarpar pero en ello les fue la derrota ya que por esa parte se enarbolaron las primeras banderas cristianas (por Gonzalo de Vozmediano, Hernando de Caraveo y Gaspar Cerezo). El asalto fue costoso,ya que subir hasta la cima con los moros defendiéndolo valientemente, no era nada fácil pero los cristianos lo consiguieron dejando numerosos muertos; las moras prefirieron despeñarse, antes que caer en manos del enemigo; algunos moros pudieron huir a la Alpujarra, entre ellos Hernando el Darra y Martín Alguacil. También entre los cristianos hubo muertos y heridos, pero menos. (Luis de Marmol y Carvajal hace una descripción tan realista que parece que tú estás allí luchando en uno u otro bando)
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