Centro Cultural La Térmica
Localización
Descripción
El edificio que alberga La Térmica, uno de los espacios más interesantes de la arquitectura malagueña del siglo XX, siempre ha contado con un protagonismo especial dentro de la ciudad.
De hospicio a Centro Cívico en los años ochenta, tiene la peculiaridad de haber sido el primer centro destinado a la ciudadanía que una Diputación Provincial puso en marcha hace tres décadas.
La Térmica, el nuevo espacio de referencia cultural de la ciudad, ha comenzado una transformación que pone en valor este edificio lleno de singularidades, y que convertirá sus patios, salas y jardines en espacios únicos donde acercarse a las formas artísticas más variadas, disfrutar de música en directo, espectáculos, conferencias y una completa oferta de actividades que abarcará todos los ámbitos de la cultura. Un espacio para la creación, el aprendizaje y el ocio integrado en la ciudad que trabajará en red con otros centros e instituciones nacionales e internacionales. Estas colaboraciones enriquecerán la oferta cultural de La Térmica y colocarán a Málaga en un lugar relevante dentro del mundo de la creación y cultura contemporáneas.
Es un vivero de talento y buenas ideas. Un punto de encuentro donde creadores y emprendedores culturales trabajan en equipo y dan forma a interesantes y novedosos proyectos. La Térmica se basa en un planteamiento moderno, abierto y plural que busca, a través de la cultura y la iniciativa personal ciudadana, desarrollar una nueva mirada sobre la realidad.
Las propuestas de La Térmica hacen del centro un espacio de difusión cultural dinámico, creativo e innovador. Un espacio con espíritu audaz y vanguardista, respetuoso con los lenguajes tradicionales del arte, aunque atento a nuevas perspectivas y formas de creación y expresión artística.
La Térmica es a su vez un punto de encuentro formativo a través del intercambio de conocimientos, ideas y experiencias. Un espacio público para el aprendizaje, abierto al diálogo, que potenciará todas aquellas propuestas en las que el ciudadano deje de ser visitante para convertirse en participante.
La Térmica alberga espacios para la creación, aulas, auditorios, zonas de actividades infantiles y lugares donde interactuar y encontrarse. Del mismo modo el centro extiende su renovación hacia el perímetro exterior, creando zonas de ocio y socialización para jóvenes.
La Térmica ha asumido la participación activa del público como eje fundamental de su planteamiento, aceptando la implicación directa de sus visitantes y reconociendo su diversidad para crear una relación productiva y cercana. La Térmica quiere ser un espacio permeable, preparado para adaptarse a los cambios. Mutable, abierto a nuevas y alternativas vías de difusión cultural e intermediación con el espectador. Los programas de creadores y emprendedores incluyen el desarrollo de un programa formativo de alto nivel que cuenta con la participación de expertos en diferentes campos de la cultura, tanto del ámbito creativo como del estrictamente empresarial, que compartirán sus conocimientos en diferentes formatos de clases y talleres. Varias jornadas de puertas abiertas dan la posibilidad de mostrar los proyectos y establecer un contacto directo y real con el público de La Térmica. Artistas y emprendedores comparten un espacio común que hace que el impulso creador se multiplique y surjan proyectos de mayor envergadura en los que participan la totalidad de los integrantes del centro.
El edificio de La Térmica esconde entre sus paredes gran parte de la historia de la ciudad desde que comenzó a construirse en 1907. Sus paredes han cobijado a heridos de la guerra, niños huérfanos o personalidades de la provincia antes de convertirse en el referente cultural que es hoy en día. La parcela sobre la que se ubica el edificio era propiedad de los marqueses de Larios, que cedieron parte del cortijo de Ahumada a la Diputación para levantar una Casa de Misericordia que acogiera a los niños huérfanos. El recinto fue cedido para ayuda social, aunque contra todo pronóstico se inauguró como hospital. Ese carácter provincial del que ha hecho gala el centro durante los últimos años no se concretó hasta que en 1988 el expresidente de la Diputación Provincial de Málaga, Antonio Maldonado, convirtió el recinto en un Centro Cívico y lo abrió a la participación ciudadana.
Referencia
Información procedente de la Diputación Provincial de Málaga (Centro Cultural La Térmica)
Principales editores del artículo
- RobeDP (Discusión |contribuciones) [4]
- Dcapillae (Discusión |contribuciones) [1]
