Homenaje de una Mangurrina
Queda plasmado en estos versos un emotivo homenaje que le hace a su pueblo una ejemplar Mangurrina.
Ella, que con su alegría y salero hace que todas las fiestas tengan un brillo más especial.
¡¡¡¡ G R A C I A S !!!!
Poesía de Ana Maria Calderón Moya
Mangurrina soy, señores,
mangurrina hasta la cepa.
Y aunque no sepa de letras,
quiero escribirle a mi pueblo
aunque la rima no sepa.
Los árabes Ben-Ha-Maruxa te nombraron,
tus colonos Bentamarga,
Gibraltar chico te apodaron,
y todos los que te aman:
Mangurria te bautizaron.
Cuántos nombres te vistieron,
Benamargosa chiquita,
cuántos nombres en tu archivo
quisieron vestirte bonita.
Desde la alta Ermita
hasta el llano Cuatro Vientos,
desde el escalonado Pechuelos
hasta mis Corrales,
por el que vivo los vientos;
toda tú tienes tu duende,
tu historia y tus penares.
Toda la gente que viene
se enamora de tus lares.
Hasta las aguas del río,
al ver tu bella presencia,
se esconden porque sus aguas
no quieren pasar vergüenza.
La ladera que te acuna
se sembró de plataneras,
de limoneros, mangos, aguacates,
hasta de hermosas palmeras,
para cuando despertases
te sintieras en el celestial oasis
que puebla todas tus tierras.
Y tus viñas con sus cepas,
que aunque de letras no sepa,
como muchos mangurrinos,
yo me crié entre cepas.
Entre toldos y morenas,
entre formaletes y cribas,
entre pasas moscateles,
entre retamas y olivas.
Por eso llevo el orgullo
de mangurrina sentirme,
que aunque no viva en mi pueblo,
por mi pueblo quisiera morirme.
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