Historia de El Borge
Parece ser que "los primeros moradores que se establecieron aquí, en El Borge, más que con miras a fundar una población de calles rectilíneas, lo hicieron con las de construir unos caseríos aislados y a corta distancia unos de otros para residencia de varias familias que debían cultivar estos campos, y unos cercados donde encerrar por las noches sus ganados, suponiendo por estas razones que su origen se remonta a los tiempos de los llamados pueblos pastores que habitaron toda la región"
Pero estas disquisiciones o hipótesis que a nada concreto conduce. Sin embargo habría que convenir en que la distribución o anárquico de sus calles nos hacen entrever que su antigüedad es indudable, remontándose a tiempos que, de momento, difícilmente podríamos precisar.
Sea como fuere, la cuestión es que sus orígenes son, a primera vista, ciertamente imprecisos. En la "Guía de la provincia de Málaga", se nos dice que "no se tienen noticias de su fundación, y los únicos datos que podemos utilizar se basan en la forma de asentamiento que tuvo". Su asentamiento con sus calles empedradas y tranqueadas ubicadas en suave pendiente, buscando el sol y el abrigo de vientos racheados del norte, nos obliga a pensar que sus primeros moradores pensaron en él, como lugar idóneo para el pastoreo, que ya consignamos como lugar para la agricultura y otras actividades afines.
Su etimología, la cual nos aclara que El Borge viene de "al-borg", palabra de raíz árabe que en nuestra lengua significa "la torre", "el baluarte", "la fortaleza".
A título de curiosidad vemos las grafías (en árabe) del pueblo, y demás pueblos colidantes como son Cútar, Almáchar, Comares y Moclinejo, que recogemos en el recuadro adjunto para mayor comprensión del lector.
Está claro, pues que El Borge, en un principio, fue una fortaleza, como su nombre propiamente lo indica. Fué, indudablemente, un recinto fortificado, un castillo, una ciudadela...
Viene a confirmarlo, en cierta medida, la Enciclopedia de Andalucía, que en su edición de 1979, nos dice, refiriéndose a El Borge, que, "al parecer, la población se asentó sobre una fortaleza, hoy desaparecida, cuyo emplazamiento sería el que ocupa la Iglesia, erigida a raíz de la conquista de la villa".
Pero El Borge no siempre fue villa o pueblo con ayuntamiento propio. En 1.487, o incluso bastantes años antes y después, tanto El Borge, como Cútar, Almachar y Benamargosa, fueron alquerías que pertenecieron a Comares, como trataremos de demostrar más adelante. Constituyeron aquellas cuatro alquerías o dehesas de que nos habla la historia y que tantos quebraderos de cabeza proporcionaron al señorío y, más tarde, al Marquesado de Comares por discrepancias con Málaga-capital como consecuencia del reparto de tierras y señalamiento de sus lindes. Los célebres pleitos que entre Málaga y Comares se suscitaron, duraron, como sabemos, varios años, con el consiguiente protagonismo de las partes implicadas.
Queda suficientemente claro que tanto El Borge, como Cútar, Almachar y Benamargosa, no eran pueblos por entonces, o lo que es lo mismo, carecían de identidad propia como tales. Eran sencillamente núcleos rurales ciertamente concretos, eso sí, unidos, naturalmente, al núcleo principal, en este caso Comares, del que dependían totalmente.
Fueron creándose algunas formas de vida en comunidad. Tal es el caso de El Borge, donde, al parecer, y como etimología indica, levantóse, originalmente, un baluarte o torre-vigía para su mejor protección.
A modo de curiosidad exponemos algunas fotografías de las más antiguas que hemos podido encontrar de El Borge.
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